Advertencia: No exponer a la radiación directa de estas longitudes de onda (UVC) a personas o cualquier otro ser vivo. Sus efectos son perjudiciales para la salud y en algunos casos con resultados negativos irreversibles.

La luz ultravioleta (UV) es un componente del espectro electromagnético que se encuentra en la región entre la luz visible y los rayos X. La luz ultravioleta profunda, o UVC, se refiere a la luz con longitudes de onda entre 200 y 280 nanómetros (nm). Se utiliza para inactivar el ADN de los patógenos en muchas aplicaciones de desinfección.

Los LED UVC son pequeños dispositivos que emiten luz UVC para destruir diversos microorganismos en agua, superficie de materiales e incluso en el aire. Debido a su pequeño tamaño, los LED UVC se integran fácilmente en una amplia gama de productos, como sistemas de purificación de agua, dispositivos médicos, purificadores de aire, germicidas superficiales, etc. 

El espectro de luz no visible para el ojo humano, comprendido entre los 100 a 400 nm, se puede clasificar en cuatro regiones separadas:

■ 100 nm a 200 nm - UV lejano (estas longitudes de onda sólo se propagan en el vacío)

■ 200 nm a 280 nm - UVC, útil para desinfección, esterilización y purificación de agua, superficies de alimentos, empaques y otras superficies de contacto de diferentes materiales.

■ 280 nm a 315 nm - UVB, útil para curado, bronceado y aplicaciones médicas como en biotecnología, dermatología, desinfección y esterilización.

■ 315 nm a 400 nm - UVA (o “casi UV”), útil para impresión, litografía, detección, cosecha, crecimiento de plantas, invernaderos y aplicaciones médicas. Los LED industriales UVA se pueden usar para aplicaciones de fotocurado.

Combinación de UVC + UVA

La luz ultravioleta profunda, o UVC, se utiliza para inactivar el ADN de los patógenos en muchas aplicaciones de desinfección. El espectro UV-A va de 315 a 400 nanómetros (nm), aunque se usa comúnmente en aplicaciones más industriales, los LED UV-A en combinación con UV-C pueden prevenir que se re-activen los mecanismos de reparación del ADN de los patógenos, inactivados con el tratamiento UV-C, y así evitar que el tratamiento con UV-C sea menos duradero. Las enzimas de reparación son sensibles a las longitudes de onda UV más altas, cuando se trata de prevenir la reparación del ADN, aquí es donde se destaca la UV-A

Datos de Interés:

Diseño compacto y efectivo: la desinfección UVC mediante utilización de tecnología LED, sigue progresando fuertemente como una solución comprobada, práctica y rentable para abordar la verdadera seguridad microbiana, las lámparas de mercurio germicida han sido la fuente confiable de UVC, sin embargo, los LED UVC están aquí para reemplazar las lámparas tradicionales de mercurio UVC. La tecnología LED UVC, por sus compactas dimensiones, da mayor flexibilidad en lo que respecta al diseño y desarrollo de nuevos productos, permitiendo piezas innovadoras donde el LED puede durar toda la vida útil del dispositivo.

Purificación del aire: los LED UVC pueden mejorar la calidad del aire en interiores y disminuir las infecciones. Operaciones de alta demanda para satisfacer las necesidades y comportamientos del usuario, diseños de productos compactos, no tóxicos, libres de mercurio y portátiles. A medida que aumentan los microorganismos resistentes a los antibióticos, los LED UVC se están convirtiendo en el método de elección para ofrecer soluciones en alta demanda.

Desinfección de superficies: la irradiación germicida ultravioleta (UVGI) es un método de desinfección en el que se utiliza la luz UVC para inactivar los microorganismos, dejándolos incapaces de reproducirse. Es un germicida libre de mantenimiento comprobado contra bacterias formadoras de esporas, con uso potencial en desinfección de superficies de alimentos, empaques y otros materiales.

Purificación del agua: los LED UVC se pueden usar en sistemas para proteger a las familias y los hogares de las fuentes patógenas comunes de enfermedades transmitidas por el agua. Los LED UVC se utilizan en estos sistemas para proteger contra contaminantes microbianos, como bacterias, virus y parásitos.

Múltiples aplicaciones: el uso de la luz ultravioleta para la desinfección está ganando popularidad sobre la desinfección química en diversas industrias, incluida la salud, los electrodomésticos, los alimentos y bebidas, y los laboratorios de agua. El incremento en popularidad se debe a la disponibilidad de LED UVC de mayor vida útil y espectros específicos de radiación. Los LED UVC proporcionan a los diseñadores una fuente de luz germicida más efectiva.

Lámparas de mercurio vs. LED UVC: las lámparas de mercurio de baja presión (tubos fluorescentes) y las lámparas de mercurio de alta presión emiten una luz casi monocromática con una longitud de onda de 253,7 nm utilizada para la desinfección y la esterilización. Estas lámparas tienen una distribución espectral mucho más amplia que incluye longitudes de onda germicidas. Los LED UVC pueden fabricarse para apuntar a longitudes de onda muy específicas y estrechas. Esto permite que las soluciones se adapten a una aplicación particular que se necesita a un costo menor y, por lo tanto, a costos más accesibles para los consumidores.

Nota:

Todos los parámetros y valores técnicos mencionados tanto en la web como en las hojas técnicas, son valores máximos. Los mismos no pueden ser utilizados durante plazos mayores a 180 segundos de una sola vez, sino que deben ser pulsados al menos a la mitad de su ciclo en dichos parámetros. Ejemplo: Si el LED es utilizado durante 90 segundos, luego se recomienda que el mismo antes de volver a ser utilizado en su máxima potencia, repose durante al menos otros 90 segundos. Esto comprende un ciclo de 180 segundos con ½ ciclo a potencia máxima y ½ ciclo de reposo.

En caso de querer utilizar el LED de forma continua por periodos mayores a los 3 minutos (180 segundos) es recomendable tener una temperatura de juntura del LED por debajo de los 60°C o bien, trabajarlo con un margen de parámetros de al menos 20% por debajo de sus valores máximos.